¡¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO¡!!!... y CHÚPAME UN HUEVO!! Aurora Cedenilla, Subdirectora General de Formación para la Seguridad Vial.

               Ocupar un puestecito en algunos organismos 

está chupado.

  (Mónica Lewinsky)

Van ustedes a perdonarme la grosería, la frase del título no es mía, es la felicitación de año nuevo de la Subdirectora General de Formación para la Seguridad Vial., así que uno mismo, sorprendido aquí en su mismidad, ha llegado a la conclusión de que desaparecer unos días y leer las noticias para retomar el pulso de este país donde tantos cargos oficiales ocupan perfectos imbéciles, e imbécilas (no vaya a enfadarse alguna ministra), debería provocar la risa si no fuera trágico. Aquí, donde quien no sea políticamente correcto las 24 horas del día termina acribillado por la beatería progresí de las Pajines de guardia y sus primos represores de las libertades individuales, resulta que una sopladora de gaitas (esa de la foto de arriba a la izquierda) con coche oficial, visa oro y la estupidez suficiente, felicita el año nuevo a todos los altos cargos del ministerio de la forma en que ven a continuación.  

Este personaje, Subdirectora General de Formación para la Seguridad Vial, altísimo cargo del Ministerio del Interior esperaría -¿cómo no?- ser jaleada por su intrepidez y la solemnidad de su escrito, que solo "pretende elevar la calidad epistolar" (sic) ¡Será pedante!. Pero mira por dónde el Jefe Provincial de Tráfico de Palencia (Manuel Esteban Figuero) con treinta años de ejercicio en ese cargo y funcionario por oposición, no a dedo, le contestó de la siguiente manera:

Estimada Aurora: La semana pasada recibimos tu "singular" felicitación de Año Nuevo. (A mí, personalmente me gusta más la Navidad)

Después de leer tu felicitación no pude por menos de sentir una sensación de rechazo, incluso pensé en contestarte con una grosería similar, pero lo dejé reposar para hacerlo más serenamente.

Llevo más de 30 años de Jefe Provincial, no en vano soy el decano de los mismos, y por supuesto estaba en el 2005, cuando iniciaste tu primera singular "misiva navideña", que por aquello de la rima, del dicho popular, etc. todos la recibimos como una atrevida y particular manera de expresión tuya.

El año pasado volviste a tu singular modo de comunicación y remachaste la anterior "otra vez". Finalmente este año, después de recordar tus gracietas para los que no las hubieran leído anteriormente, vuelves a las andadas y nos invitas a succiones imposibles. Sencillamente es una horterada y una expresión de muy mal gusto, que en el mejor de los casos deberías reservar para tus círculos íntimos, pero no para el colectivo de compañeros, miembros de un organismo al que queremos y del que, como representantes de los diversos ámbitos, no nos gusta chupar nada, salvo un chupachups.

No sé lo que pensarán los demás, pero creo que la mayoría coincidirá conmigo, al menos por comentarios oídos en otras ocasiones, por ello les traslado también mi contestación. Por cierto, compañeros, ¿os imagináis a vosotros utilizando este estilo de expresiones en vuestras felicitaciones?¿Cuál hubiera sido la respuesta de nuestras compañeras?

Afectuosamente, a pesar de todo y sin rencor.

Manuel

Seguramente a ustedes, como a mí, la contestación de Don Manuel les parecerá de lo más comedido dado el cariz de la felicitación de esta individua. Pues bien, a la mano derecha de Pere Navarro no le debió gustar mucho la contestación, de tal manera que Manuel Esteban es informado 9 días después que cesará en su cargo con fecha 1 de febrero. Lo hace el propio Pere Navarro mediante una llamada de teléfono. A Manuel Esteban le queda un mes y medio para jubilarse, pero no lo hará como Director Provincial, sino que ahora ha sido relegado a un cargo en el que se limita a hacer fotocopias en la jefatura. La Asociación de Técnicos de Tráfico de España enviaba una carta a Pere Navarro hace unos días en la que le pedía que reconsiderara su decisión.Carta a la que se ha hecho caso omiso, lo mismo que a las peticiones de los diferentes sindicatos, que han solicitado que no se manche el currículum profesional de Manuel Esteban por una cosa como ésta. Manuel Esteban es, ahora mismo, el decano de los jefes provinciales de tráfico de toda España. Aurora Cedenilla es la lumbreras que afirmó en televisión que el 94% de los accidentes con presencia de un animal se produce por el atropello del mismo. ¡Y que para ser funcionario tengan que preparar oposiciones durante varios años y si lo consiguen caigan con un jefe o jefa con esta preparación!

Imaginen que este tipo de felicitaciones las envía un hombre a sus subordinadas, el tipo hubiera tenido que salir del país sin billete de vuelta y despedido cariñosamente en la estación con gritos de misógino, pervertido, baboso, añadan ustedes las que quieran que se quedarán cortos. Pero a la protegida de Pére Navarro se le consiente no sólo la tontería, sino prevalerse además de su puesto para degradar al único subordinado que ha tenido los santos cojones de decirle las verdades a la cara.

Los compadres de la biutiful no solamente se sienten impunes para meterle mano a la viruta de los fondos de reptiles, sino que exigen sumisión absoluta a todos sus súbditos en esta cueva de Alí babá si es que quieren seguir apareciendo en la foto, pretenden el aplauso para quien desde su puesto de trabajo (?) se dedica a hacer penosos ripios. O son tan estultos (y estultas) que no saben lo que hacen, o son tan miserables y miserablas, chulos y chulas que les importa una higa o higo. Son así, porque así los ha hecho su codicia y su amoralidad, su irresponsabilidad y su caspa. Y ahí siguen, y aquí estamos, sin una sola algarada, en silencio. Y la rebeldía se me va tornando en desesperación. Este pueblo español no tiene alma, no tiene sangre, solo piercing, tetas, extensiones y algunas… pelos en los huevos y nada en el cerebro.

Esta España, no se merece a los pocos justos que le quedan, nada pasaría si se fuesen todos y la abandonaran a su suerte. No se puede intentar salvar lo que no quiere ser salvado...
Personalmente la zafiedad del mensaje me importa un bledo. Ella lo hacía obedeciendo a los típicos protocolos de la campechanía para negar la jerarquía. Así, informal, que sus subordinados se sientan iguales y cercanos. Esto de negar la jerarquía es algo que a los progres, les gusta tanto que lo representan a todas horas. Pura hipocresía, como se demuestra en lo verdaderamente indignante del asunto: la degradación del funcionario a la fotocopiadora. La más prepotente jerarquía en estado puro, prevaliéndose de su cargo, y eso es lo que añade gravedad al asunto. Como uno de sus subordinados no ha querido reírle la gracia, "por cojones" ha conseguido que lo cesen. Todo un ejemplo de ejercicio de la autoridad de modo democrático, moderno y responsable. Y los cómplices pasivos miran para otro lado en este país del miedo, mientras se convierte en la tierra  de los trepas ignorantes o estúpidos, de los coros de cantamañanas que aplauden la insensatez por si las moscas y… así nos va.     
    

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