Casi todo el mundo conoce que existen programas informáticos dedicados a la estadística capaces de manejar una gran cantidad de números, sin embargo no es tan conocido el hecho de que también existe un software cualitativo capaz de manipular palabras, imágenes, etc. Se trata del “software cualitativo”, el cual puede ayudarnos a manejar la gran cantidad información que suele acompañar las investigaciones cualitativas. Es más fácil necesitar este tipo de ayuda en una investigación cualitativa, dado ese gran volumen, que en una cuantitativa, donde una calculadora de sobremesa –aunque no sería lo mismo que un gran programa informático-puede ser suficiente.
Son programas complejos puesto que tienen que pasar el texto, el sonido o las imágenes a un determinado código y trabajar en
nuestro ordenador de acuerdo con esos códigos, aunque aparentemente no sea así pues al dar nuestras órdenes de trabajo, en alguno de ellos, no es fácil apreciar que se trabaja bajo esas premisas.
nuestro ordenador de acuerdo con esos códigos, aunque aparentemente no sea así pues al dar nuestras órdenes de trabajo, en alguno de ellos, no es fácil apreciar que se trabaja bajo esas premisas.
Los programas cualitativos varían mucho más que lo hacen los estadísticos, pero en general su forma de trabajar se basa en la recopilación de un gran número de palabras (transcripción de las discusiones de grupo, entrevistas, etc.) que son codificadas. En algunos de ellos esa codificación se realiza manualmente, proceso arduo y lento, pero es impactante ver, al ejecutar ese programa, el mismo tamiza y resume lo aportado presentando a menudo todo ello en la forma de una estructura, por ejemplo un diagrama de árbol. No es que el programa analizar los datos, nuestros ordenadores son –todavía-lo suficientemente tontos para no entender lo que están manejando, lo cual supone que para que los agrupen u ordenen en una determinada forma, debemos de ser nosotros los que aportamos esas instrucciones.
El uso de programas como los que abordaremos a continuación no será una comprensión mucho más rica de lo que pueda ser cualquier dato estadístico, pero es cierto que también es más complejo. Se tarda tiempo, pero algunos de ellos permite ir analizando determinados datos mientras sigue codifican de otros. A veces el software no nos ahorra mucho tiempo en el análisis, pero hace este mucho más profundo, generalmente más exacto y el tiempo que nos “roba” en esa primera fase, nos es devuelto a la hora de presentar los resultados. También nos facilita enormemente la estructuración de datos al obligarnos a clasificar éstos.
Existen una gran cantidad de libros dedicados a este tipo de programas, en mi opinión uno de los mejores puede ser “Computer Programs for Qualitative Data Analysis” de Matthew B. que publica la editorial Sage. Quien busque un libro de fácil lectura que se olvide de ello. Por contraposición al software estadístico -el cual presenta grandes similitudes pues todos los programas tratan de hacer lo mismo- es tal la variabilidad de enfoques que nos ofrecen los programas dedicados a la investigación cualitativa que ello se traduce en programas muy diferentes y en que el conocimiento de manejo de uno cualquiera no nos aporta ninguna ventaja la hora de trabajar con otro diferente.
Si nos tratamos de introducir en el Software específico para el análisis cualitativo tendremos que utilizar programas que nos permitan:
- -Introducción de datos.
- - Procesado de textos.
- -Integración y agrupación de conceptos.
- -Construcción de bases de datos basadas en texto.
- - Software para el conteo de texto.
Sin olvidar los medios de presentación, multimedia o no.
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