CARTA A WILLY TOLEDO

Vagamente recuerdo haber visto una película en la que interpretabas a un vendedor asesino, pero te encargaste de dejarme tu curriculum a través de las páginas de los periódicos. Willy (suena a esnob convertir el Guillermo de toda la vida en ese Willy tan americano, tú, el azote del imperio) ese crack de la investigación, al que imaginó encerrado día y noche en alguna biblioteca clandestina revisando esos papeles en que “he investigado durante años en fuentes distintas a los periódicos de aquí” ¡pero hombre, si el Granma lo puedes consultar por Internet! Y tú quemándote los ojos a la luz de esas velas, con las contraventanas cerradas para evitar ser detectado por la macabra policía liberal-capitalista. Me dejaste, como decía, tu curriculum
con cuatro frases, un poco forzadas por tu ciega intransigencia, tu miopía del ojo izquierdo que te impide ver lo que sucede por ese lado, pero cuatro frases magistrales.¡A ver quien escupe con más gracia que mi Willy sobre la tumba de un pobre paria privado de libertad hasta su muerte entre las fauces de ese “caimán caribeño” que agoniza más allá del gran charco! Nadie, que lo sé yo. No puedo por menos que escribirte estas letras después de que tuvieras la amabilidad de darte a conocer de una forma tan franca, tan abierta, tan como tú eres.

Dices Willy que “la mayoría de los disidentes encarcelados en Cuba son terroristas”. Igualito, oye, que en el resto de dictaduras. Pero no suavices las cosas, hombre, no son “ la mayoría”, si nuestro libro de cabecera es el Granma, entonces debemos aceptar que son “todos”, incluido ese negro de los cojones que en vez de ponerse a cantar Guantanamera para matar el hambre, va y se muere con tal de moverle la silla al comandante.

Menos mal que tú, jugándote la vida en este país donde no se puede decir nada, no como en Cuba, decía que tú, entre estancia en Lanzarote con Aminatú y petición de otra nueva subvención para tu compañía Animalario, contactaste en los sótanos de algún garaje con tu "garganta profunda" y en tu bondad nos sacaste del error. Ahora sé que aquellas mujeres que me querían vender –decían que para comer- hasta los bordados de su cama en Santa Clara, aquellos que pescaban a escondidas para darnos de comer por unos dólares, la jinetera de la esquina y unos niños que me cambiaron sus sonrisas por los restos de jabón y ropa usada, no eran cubanos, sino agentes infiltrados de vete a saber que país, aunque sospecho de una gran potencia americana. Ahora sé, que cuando después de 200 kilómetros de viaje por la isla no encontré leche para un café, no fue porque aquello sea lo que yo pensaba, algún hijoputa infiltradazo de Oregón que fue a ordeñar todas las vacas. Y los Castro, pobrecitos, mandando desde Suiza –de sus ahorros, oiga- remesas de dinero para alimentar a tanto desagradecido.

Así que, cuando te mienten a la familia, tú a lo tuyo, a defender los derechos del pueblo saharaui, una causa nobilísima que te permite quedar como lo que eres, un progre de pro, a montarla en la Gala de los Goya con el “no a la guerra”, ¡Coño, por cierto! Con la propaganda que le disteis a esa película y no he logrado verla en ningún cine. ¿Quién pone la pasta de la producción? No te esfuerces más Willy querido, ya eres dueño de mis afectos y mis ideas, no tengo otras al margen de las que tú y los tuyos me dictéis. Aquí me tienes, tan contento y tan políticamente correcto, no como tú, que después de tanto luchar por un partido desde tu reconocida sabiduría y preparación política e intelectual, vas y la cagas con estas cosas.

No sigas por ahí, es lo que tiene el capitalismo, que luego te retiran las subvenciones y no puedes volver a facturar 679.823,5 euros ( más de 113 millones de las pelas antiguas) como en 2008, ya veremos la declaración de 2009. Así que a lo tuyo, a aquéllas frases de “ Es muy triste que estemos dejando escapar a este gobierno. Hay mucha gente del cine que vota al PSOE como con lástima”. Entonces sí que lo hacías bien, a lo tuyo, sólo lo tuyo, ni siquiera al resto de compañeros “artistas”. ¡Jo, como me gustó aquello de… “a los músicos? Pues que se busquen la vida”! Claramente, así, que entre los artistas siempre hubo clases, los que pueden opinar desde una tribuna como la Bardem, tú y tus amigos y el resto, esos mierdecillas. Y al PSOE lo que pida, oye, que se portó en 2005 con la subvención y el Premio Nacional de Teatro por aquello de “Hamelín” en que hasta el acento de la portada y los carteles estaba mal puesto. ¡Y no digamos Cultura en los años sucesivos! Tú y yo sabemos que nunca le falló a Animalario, tu empresa, ¡Huy, perdón, Compañía de Teatro, empresa huele a los malditos capitalistas! Lo nuestro siempre a sido la utopia y los seres humanitarios de izquierdas como Ho Chi Min, Stalin, Pol Pot, Castro, Chavez. ¡Que equipo, tío, para ganar la liga! Lo de sus muertos son mentiras, a fin de cuentas “la mayoría serían terroristas”, tú y yo lo sabemos “por que hemos investigado durante años en fuentes distintas a los periódicos de aquí”, osea, en los de allí, libres y no dirigidos como en estas democracias occidentales de mierda. ¿Y que es un muerto? Un negrata fontanero metiéndose en política, la política es para los grandes hombres, los cómicos, las cómicas y pare usted de contar ¿Qué sabran los demás?

Así que gracias, maestro, he comprendido que no puedo vivir sin tus enseñanzas y la próxima vez me voy contigo y Aminatú a que me expliquéis lo de perder solo 5 kilos en una huelga de hambre de 32 días, no como estos cubanos del carajo.

¡Compañero. Todo sea por la libertad…de algunos!